
En la sentencia histórica del Tribunal Supremo de Madrid del 10 de julio de 2025 que confirmó que la ayahuasca no es ilegal en España los magistrados se dirigen al Instituto Nacional de Toxicología para ponerles en su lugar recordándoles sus competencias e invitándoles a que no se extralimiten en sus funciones con informaciones falsas sobre la legalidad de la ayahuasca ya que la jefa del servicio de drogas del INT que fue como perita al juicio afirmó rotundamente que la ayahuasca era ilegal en España y que estaba fiscalizada. Esta señora se llama María Antonia Martínez González y su intervención en la que aportó información deliberadamente falsa y sin evidencias fue por cierto bastante venenosa para ser una supuesta experta en «tóxicos». Por la información que me ha llegado parece ser que no es la primera vez que esta señora aporta información falsa con la que se desacredita a sí misma y es por ello que se la debe investigar y destituir.
El fiscal se agarró de sus informaciones falsas para recurrir la sentencia absolutoria de la Audiencia Provincial de Madrid que más tarde fue confirmada por válida por el Tribunal Superior de Justicia que confrontó las mentiras y ataques de esta señora con estas palabras:
«El Ministerio Fiscal invoca el dictamen evacuado en el plenario por la perito del Instituto Nacional de Toxicología, en que concluye que esta sustancia está fiscalizada.
No cabe atender categóricamente a este planteamiento. Sin poner en duda la cualificación del Instituto Nacional de Toxicología, y la solvencia de sus informes, no le incumbe establecer qué sustancias se encuentran fiscalizadas, consideración jurídica, pues sus competencias como órgano técnico son las de auxilio a la Administración de Justicia y contribución a la unidad de criterio científico, a la calidad de la pericia analítica y al
desarrollo de las ciencias forenses, mediante emisión de informes y
dictámenes, y práctica de análisis e investigaciones toxicológicas
encomendadas, mediante procesos de investigación.»
Además en la misma sentencia se la confronta por inventarse supuestos informes oficiales que dicen que cantidades de ayahuasca pueden considerarse para autoconsumo y cuales para distribución o «tráfico» cuando no existen tales informes y es tan legal en España consumir ayahuasca como facilitarla o venderla:
«No existe, por otra parte, precedente jurisprudencial que refrende las
conclusiones presentadas motu proprio por el Instituto, a propósito de la
dosis mínima psicoactiva, dosis de consumo diario etc, que se dice evacuado
conforme a los parámetros del anterior dictamen emitido a fecha 18 de
octubre de 2001 y que desembocó en el Acuerdo del Pleno de la Sala
Segunda del Tribunal Supremo de 19 de octubre de 2001″
La confrontación le da de lleno también a la Agencia Española del Medicamento que en un informe de una de sus oficiales llamada Lidia Fernandez Matellanos afirmaba falsamente que la ayahuasca no era legal en España. En dicho informe afirmaba falsamente también que es tóxica sin aportar evidencia cientifica alguna más que la de su prejuicio y negando los estudios del doctor Jordi Riba en el Hospital de Sant Pau de Barcelona que demostraron que la ayahuasca no es tóxica, es cardiovascularmente segura y no produce adicción al no activar los circuitos de recompensa del cerebro además de tener un inmenso potencial terapéutico para multitud de afecciones de salud mental.
Con esta sentencia han quedado en evidencia las mentiras de Antonia y Lidia, altos cargos de organismos oficiales como el INT y la AEMPS que afirmaban falsamente que la ayahuasca es ilegal.
Esto es muy importante dado que la persecución que hizo la sección de la policía antisectas a la ayahuasca entre 2022 y 2024 se basaba en ese informe falso de la Agencia Española del Medicamento.
En estos dos artículos se aclara la falsedad calculada de ese informe por la que solicito que se destituya de su cargo tambien a Lidia Matellanos de la Aemps por declarar mentiras en nombre de la ciencia y la ley:
Doy gracias a todos los que hemos trabajado para que la verdad salga a la luz por el bien de todos.
