Hace poco llegaron a mis oídos fuertes juicios emitidos por pastores de una iglesia evangélica que dicen: » La ayahuasca es brujería y los que la usan son sectas y trabajan para el demonio». Se lo dijeron a unos amigos mios que se lo creyeron, obedecieron y ya no quieren juntarse conmigo porque dicen que trabajo para las tinieblas. No son los únicos que la condenan, también pueden encontrarse en internet artículos de curas católicos que hablan alertan sobre la secta del ayahuasca.
Es curioso que esas mismas iglesias que condenan la ayahuasca digan, como en el caso de estos pastores evangélicos, cosas tales como que la bisexualidad, la trisexualidad, la homosexualidad y la transexualidad son aberraciones a los ojos de Dios y que » a esa gente se le ha metido dentro un espíritu maligno de confusión» o que «están pagando por los pecados de sus padres o de generaciones anteriores», que la humanidad es esencialmente corrupta y pecadora e indigna del amor de Dios, que solo se salvarán aquellos que obedezcan la férrea moral que ellos proponen y me pregunto que les puede ocurrir a los niños que se crian con estas ideas, esa es la verdadera brujería, el verdadero embrujo, la tenebrosa hipnosis pues cuando te identificas con esas ideas y vives en ellas como si fueran verdad caes en un estado de autohipnosis y sufrimiento que te contrae, no digo que esos niños se traumaticen necesariamente porque el espíritu tiene la capacidad de sobreponerse a toda educacion o intento de educastración ni a que necesariamente eso les vaya a sepultar o sepultar de por vida pero puede ser una gran molestia incluso desesperante y creo que un mimo y atención a todo ello en la infancia y adolescencia es fundamental . Si realmente leyeran los evangelios sobre lo que dijo o se cree que dijo Jesús de Nazaret podrían ver que de la boca de Jesús no salió una sola palabra sobre la sexualidad de las personas, el siempre apoyó a los que la sociedad excluía como a María Magdalena que representa a todas las mujeres que son llamadas «putas» por expresarse cuando en realidad «prostituirse» es cuando cedes ante la tiranía del juicio del otro, es decir, somos prositutas, «nos callamos como putas», cuando nos sometemos a la esclavitud del juicio ajeno. Somos prostitutas cuando no expresamos nuestro deseo o amor por una persona por el miedo al que dirán. Al menos las mujeres, transexuales u hombres que se prostituyen en la calle lo hacen al descubierto sin esconderse lo que hacen aunque si escondan su corazón o se escondan del amor y el cariño reales en muchos casos. Y también somos prostitutas cuando tenemos que demostrarle a todo el mundo o a «nosotros mismos» que no lo somos y que siempre actuamos según lo que nos surge del ser o según lo que parece surgirnos de él.
Por otra parte estas iglesias dicen que la ayahuasca no ayuda, que lo único que ayuda es » el poder de la sangre de Cristo» y que la ayahuasca «no es de Dios». No sé si conocerán el cuento del hombre que se ahogaba y pidió ayuda a Dios; un barco pasaba por allí y le dijo: ¡sube! Y el respondía : «no, yo soy un hombre de fe y Dios me salvará» , hasta tres barcos negó y cuando murió le increpó a Dios que no lo salvara a lo que Dios respondió: ¡ pero si te mandé tres barcos!. La ayahuasca no es la panacea ni la salvación pero es de gran ayuda y es un instrumento para conectar con la divinidad y eso que se conoce como el «Amor de Dios», por eso se le llama «enteógeno» que quiere decir «Dios en Nosotros» , igualito que en el evangelio de Lucas se habla de que el Reino está dentro de nosotros, que Dios no está afuera sino dentro y nosotros dentro de Ella/Él, que somos en Ello, en lo divino, en la divinidad. Y desde las primeras iglesias y cultos esto se sabía por eso se usaban panes hechos con trigo de ergot visionario y vinos donde se agregaban hongos psilocibes porque desde siempre los cultos religiosos o espirituales estuvieron en íntima unión con los enteógenos, la condena de todo ello empezó en la Edad Media en realidad.
La Inquisición era una secta, como lo son muchas de las sociedades y sistemas legales actuales, el que trata de salirse de ellas se expone muchas veces al rechazo, al castigo e incluso a la cárcel , la tortura y la muerte.
Una secta es un lugar de donde no se puede escapar, donde es muy difícil escaparse o donde quedas atrapado sin darte cuenta porque crees que solo puedes encontrar allí el «amor verdadero», la verdad o la libertad.
En este sentido la sociedad actual es una secta, existen «morales religiosas» y «morales laicas» que se adoctrinan desde las escuelas y familias. El que las leyes sean mas o menos democráticas no significa que no haya dictaduras, pactos inconscientes y silenciosos en la sociedad de exclusión y rechazo hacia determinados asuntos, medicinas o personas. Además existen sistemas legales que prohiben a su antojo lo que se debe o no se debe hacer, lo que es medicina y lo que no. Por ejemplo Francia e Italia se prohibió la ayahuasca negando toda la evidencia cientifica que se ha creado sobre su ausencia de toxicidad y beneficios y eso que en esta sociedad los estudios cientificos tienen peso porque la ciencia funciona muchas veces también como una secta.También la psicología actual que se da en las universidades es sectaria pues solo se considera verdad lo que dice la corriente cognitivo -conductual, dejando a un lado lo espiritual y profundo y los condicionamientos adquiridos durante la infancia y adolescencia.
Existen también muchos grupos ayahuasqueros o «espirituales» que funcionan como sectas y tambien existen grupos que solo lo son «un poco» y otros que te ayudan a tratar de salir de todas las sectas y son precisamente los que son más llamados son como sectas para desprestigiarlos, eso no niega que miembros de estos grupos que no son sectas o no lo son del todo no se vuelvan sectarios o que sean sectarios a momentos o en algunas cuestiones, todos podemos actuar como sectas en diferentes momentos, situaciones y relaciones , de paso decir que existen relaciones de parejas que también son sectas, no por el amor que hay entre ellos sino por la manera en la que se tratan e imponen. Existe también la secta de los que dicen que la ayahuasca solo se puede tomar en la selva o que solo pueden darla chamanes y taitas. Este último mes dos facilitadores indigenas fueron detenidos y apresados en Mexico y en la comunidad de uno de ellos de origen colombiano se alegran de que sea castigado por «vender la medicina y su cultura» ya que se generan envidias cuando se gana dinero por ello y es porque tambien está la secta de los que creen que el dinero es malo y tambien está la secta de los que se creen que son indignos de ganar dinero y cuando alguien se quiere salir de ella lo critican como si solo los que tenemos sueños bonitos para la humanidad no pudieramos tener dinero para llevarlos a cabo. Tambien existe la secta de los que se rechazan a si mismos y cuando alguien se gusta a si mismo lo critican de vanidoso como si la humildad fuera en realidad autohumillación en vez de ausencia de ostentación , como si estuviera prohibido brillar para algunos o solo se pudiera un poquito, la dosis de brillo permitida. La mente individual es una secta porque no es individual , es colectiva, mi mente no es mía, es de «otros» que están adentro y también afuera y no me refiero precisamente a entidades demoníacas aunque a veces funcionen como tal, me refiero a que las ideas que tengo acerca de todo y de lo que soy son una cocreación que vive como un programa en mi mente del que puedo liberarme si me desidentifico de ella dejándola de escuchar, volviéndome sordo a ella y abrazándome para así acceder a lo que hay más allá de ella, a la fuente de la creatividad que transforma toda mente y la inspira convirtiéndola en arte del pensamiento sintonizada al Amor del Corazón. Desde ahí se van resignificando los conceptos y significados en nuestro inconsciente que está estructurado como un lenguaje, cada uno tenemos ideas acerca de lo que es la inocencia, la libertad, la dignidad, el dinero, las relaciones, el amor, la sanación, la «evolución», las emociones y muchos más significados que afectan profundamente a nuestra vida.
Mi mente no es mía, pero podemos tomar la decisión de no ser de nuestra mente, el camino no es poseerla y controlarla tratando de que me obedezca pues eso supone un enfado por creer lo que nos dice. Una de las claves es la desatención del pensamiento intrusivo y el abrazo de la energia emocional . Al abrazar ese sentir nos responsabilizamos desde el corazon de él y no dejamos que se haga cargo la mente con sus soluciones ,que es lo que le va quitando la «pila» de su falso poder que le otorgamos con nuestra credibilidad y es lo que permite que ocurra el desligamiento. No es que la mente sea mala, es que es inconsciente y se inventa la verdad con lo que ha recopilado, pero al dejar de escucharla se va poniendo al servicio del amor al comprender que el ataque no es el camino.
Así es posible liberarse de ese «tirano interno» que es ese programa que se ha creado con ideas de autopunición, autoexigencia y desconfianza el curso natural del florecimiento de nuestro ser que ya es completo y a la vez eternamente expansivo en el amor. No quiero decir con esto que haya que rechazar la mente pues cuanto mas se rechaza más nos identificamos sino dejar de mostrar interés en lo que nos dice sin discutir con ella, diciéndole «no sé» . Existe una parte funcional de la mente para movernos en el mundo que nos permite usar instrumentos y hacer tareas cotidianas, pero en este caso hablamos de la parte disfuncional , la parte de la mente que cree que que atosigarte es ayudarte por ejemplo, que necesita ser «reeducada» y eso ocurre solo cuando lo dejamos en manos del Amor, cuando entregamos la mente y las emociones porque no sabemos que hacer con ellas a ese Poder Superior, porque dejamos de tratar de darles la razón o quitársela pues no se puede reeducar a la mente desde la mente, en el proceso puede ayudarnos abrirnos a escuchar a un otro que le esté ocurriendo esa desidentificación milagrosa, escucharlo más allá de nuestras creencias, observando nuestras reacciones internas, resistencias y opiniones. Tampoco quiero decir que todo lo que haya en nuestra mente sea nocivo o que porque no sea «nuestro» o inherente al ser que somos sea descartable pues nuestros padres y algunas personas que interacruaron en nuestra infancia con nosotros tambien nos inspiraron , apoyaron y compartieron ideas o actitudes de las que estamos profundamente agradecidos.
También la ayahuasca , el bufo alvarius o el mdma nos ayudan usados en un entorno y con los facilitadores adecuados, o simplemente en pareja en una habitación a solas en el caso del mdma, a conectar con ese inmenso amor que hay más allá de la mente. En el caso del iboga el proceso es distinto pues la iboga lejos de esa experiencia de amor inmenso lo que produce es una sobreexposición al estímulo temido. Esa estimulo temido es la idea que hemos creado acerca de nosotros mismos, te la repite a una velocidad obsesiva hasta que te rindas y dejes de luchar y la abandones, la llaman la «quiebramentes», es una tortura ampliada de nuestra tortura consentida interna. Por eso es importante explicar antes de una toma de iboga que vamos a ver justo lo que no queremos ver, lo que más nos desagrada, y que si nos creemos que somos la idea que hemos creado sobre nosotros mismos con toda su culpa e indignidad podemos llegar a suicidarnos.
Respecto a la ayahuasca y la brujería, podemos encontrar facilmente en internet fotos y videos de chamanes con las plumas , los humos, cantos, la wayra, ícaros e incluso calaveras que traigan a nuestra inconsciente colectivo el arquetipo del brujo. Es cierto que existen en el mundo chamánico aún supersticiones y que algunos de ellos dicen usar poderes invisibles para atacarse unos a otros, también algunos dicen succionar las «malas energías» aspirando zonas de tu cuerpo con su boca o soplándote tabaco en la coronilla. Sin embargo la ayahuasca ha experimentado una descontextualización en los últimos años de creencias y ritos rígidos. Es decir, el uso chamánico del ayahuasca, es solo uno de ellos. También existe un uso psicoterapeútico de ella donde se realizan sesiones con música de ordenador y una sobriedad de elementos ornamentales o tribales, existe un uso científico que realiza estudios que demuestran el beneficio de la ayahuasca para determinadas situaciones psicológicas como la depresión , el trastorno postraumático en soldados o enfermedades degenerativas como el alzheimer o el parkinson, existe un uso religioso sincrético que fusiona elementos chamánicos con el cristianismo como las iglesias del santo daime, union do vegetal y otras o las iglesias brasileñas o las iglesias de EEUU donde por ahora es necesario en algunos estados adquirir esa estructura para poder usar esta medicina. Incluso un artículo reciente habla de una organización de culto satánico que la utiliza.
Por lo tanto es necesario separar la ayahuasca en sí y sus propiedades del uso que se le dé y de quien la utilice. Lo que está claro es que utilizada desde un corazón abierto al amor y a la libertad la ayahuasca nos ayuda a conectar con nuestra inocencia esencial, esa experiencia de inocencia incorruptible que vive en nuestra esencia desde donde recibimos el infinito amor que somos y desde donde surge una nueva visión del mundo y de la vida que nos reconcilia con los otros y ver lo que ocurrió, ocurre o puede ocurrir desde una mirada nueva y plena. Es decir que la ayahuasca lejos de ser una brujería, puede ayudarnos a desembrujarnos de la indignidad, la culpa y el autorechazo.
Puede ayudarnos porque nos permite la posibilidad de conectarnos con ese amor donde no existen las sectas y no me refiero a la secta autoimpuesta de «ser siempre incondicional» y confundir eso con no poner límites. Me refiero a un amor que se experimenta adentro nuestra en el que nos conocemos sin definiciones ni evaluciaciones, que es puro goce de ser , creatividad y enamoramiento del amor, sonrisa de reconocimiento de nuestra hermosa libertad.